La Alcaldía de Pasto, a través de la Secretaría de Gobierno, celebró el Día del Perdón y la Reconciliación, que en su cuarta versión tuvo como lema ‘Trabajando Unidos por la Paz, el Perdón y la Reconciliación’. Esta importante fecha es una iniciativa de la actual administración y fue aprobada por el Concejo Municipal e institucionalizada mediante el Acuerdo Municipal 019 del 13 de julio de 2016.
El evento, que fue organizado por la Oficina Municipal de Víctimas, dependencia adscrita a la Secretaría de Gobierno, desarrolló una agenda de eventos culturales y actividades académicas con el objetivo de generar la reflexión sobre el papel del perdón y la reconciliación en un escenario de paz en nuestra región.
Carolina Rueda Noguera, secretaria de Gobierno de Pasto, aseguró que la Administración Municipal ha hecho aportes económicos importantes en torno al tema de víctimas, entre otros, para la construcción de un albergue que recibe de manera digna a población víctima del conflicto y para actividades propias de la Mesa Municipal. La funcionaria subrayó que este año fue la misma mesa la encargada de la organización, programación y desarrollo de la celebración de esta importante fecha.
La programación académica que cerró la conmemoración contó con la presencia de Manuel Antonio Velandia, invitado especial al evento y reconocido por el Registro Único de Víctimas como el primer homosexual víctima del conflicto armado en el país, razón por la cual abandonó el país en el 2007 con rumbo hacia el exilio.
“Construir la paz no es sólo construir un acuerdo, es mejorar la convivencia de los que hacemos parte de la comunidad y en la comunidad hay ciudadanos que ni siquiera se han pensado víctimas y lo han sido, hay victimarios que creen que los victimarios son otros. La paz implica el perdón y esto es aceptar que todos cometimos errores, algunos por los que hicieron y otros, por lo que dejaron de hacer. Y la reconciliación es asumir que el otro es diferente de mí, que somos únicos que nadie piensa como yo, que nadie siente como yo, que nadie actúa como yo lo hago, y que el otro experimenta el mundo de una manera diferente de mí, pero que esa manera es tan válida como la mía”, expresó Manuel Antonio Velandia.